5 Reflexiones para empezar el año

 

El inicio de año representa una oportunidad única para reconectarse con usted mismo y tener un nuevo comienzo, con más energía y fortaleza. Poténcielo con estas cinco reflexiones.

Usualmente esperamos las festividades de fin de año y los primeros días del año nuevo para desconectarnos de nuestra vida diaria, del trabajo y de las responsabilidades. También los aprovechamos para descansar y compartir en familia; algunos para viajar y conectarse con la naturaleza y, casi todos, para al menos bajar el ritmo de vida.

No importa qué tipo de actividad haya realizado en esta temporada, lo importante es que este tiempo tiene algo en común para todos: le recuerda la importancia de disminuir el ritmo para rendir más y apreciar el poder de las pequeñas victorias y los momentos simples de la vida.

Además, estos momentos de calma que nos ofrece el cambio de año brindan la oportunidad de dejar de correr de una reunión a otra, de una entrega a otra y, en general, de estar todo el día apurado en el trabajo con un montón de pendientes por hacer. Por esto, es el momento perfecto para hacer una reflexión profunda sobre su ser y sobre hacia dónde quiere dirigir su vida.

De hecho, el estado de tranquilidad que la mayoría experimenta durante estos días es el estado perfecto para revisar cómo se encuentra su vida y evaluar qué tan feliz está siendo, para identificar oportunidades de mejora y encontrar soluciones creativas a las cosas que no le gustan tanto.

Tomar un descanso de las redes sociales (así sea durante unas horas al día), disminuir el tiempo en pantalla o dedicar tiempo a meditar al inicio o al final del día puede ayudarle a propiciar el estado de calma e introspección necesario para reflexionar sobre estos cinco aspectos, cuyas respuestas seguramente ya están dentro de usted, pero requieren que abra su mente y alcance un estado de mayor tranquilidad para aceptarlas y acogerlas.

Le invito entonces a que responda estas cinco preguntas mientras sigue relajado y antes de que empiece el acelerado ritmo de este nuevo año.

 

1. ¿Qué es lo que más me gusta de mi vida diaria?

Empezar la reflexión con un estado de agradecimiento siempre será una buena idea. Le ayuda a adquirir una mentalidad positiva con respecto a su vida y a encontrar soluciones en lugar de problemas.

Mire entonces hacia atrás, hacia los últimos meses, y sea consciente de qué personas, situaciones o actividades de su vida diaria son las que más le gustan y emocionan. No tiene que ser algo grande; piense en simples detalles, rituales y momentos que realmente haya disfrutado.

 

2. ¿De qué necesitaba un descanso este año?

Después de alcanzar un estado de gratitud con la primera reflexión, vale la pena preguntarse qué aspectos de su vida no le hacen tan feliz y cómo puede mejorarlos.

Es clave llegar a este punto con una mentalidad positiva. No se trata de listar problemas ni de quejarse de lo difícil que ha sido la vida, sino de encontrar soluciones. El poder del cambio está en sus manos.

Todas las personas, durante toda su vida, se enfrentan a retos y momentos difíciles. Pero este tiempo más calmado de inicio de año es una oportunidad para mirar las cosas con menos apasionamiento y mayor decisión. Ser más jugador y menos víctima en su vida. Hacerse el desentendido o no enfrentar estas situaciones que le incomodan no hará que mejoren. Solo su acción y decisión podrán hacerlo.

Piense en cómo podría mejorar su regreso a la vida diaria, tanto en lo personal como en lo laboral. Este simple acto, incluso sin actuar de inmediato, puede ayudarle a enfrentar su vida de una mejor manera. Pero si lo lleva a la acción, los resultados serán aún mejores.

 

3. ¿Cuál es mi propósito de vida?

Conéctese interiormente y analice cómo se siente en los aspectos emocional (relaciones con las personas que le importan), espiritual (su relación consigo mismo y con un ser superior), físico (su salud y su cuerpo), intelectual (su desarrollo y crecimiento profesional) y económico (el dinero que gana y las cosas que tiene).

Visualice dónde le gustaría estar en 5, 10, 15 o 20 años en estas cinco dimensiones. O piense qué le gustaría que dijeran de usted en cada uno de estos aspectos al final de su vida. Luego reflexione sobre qué está haciendo cada día para encaminarse hacia allí o si simplemente está esperando que ocurra un milagro.

4. ¿Cuáles son mis metas para este año?

Este también es el momento de fijar metas más concretas para este año. Quizá la reflexión anterior, por su mirada a largo plazo, le haga pensar que sus sueños son muy grandes o incluso inalcanzables. Por ello, es conveniente aterrizar cada uno de estos sueños o propósitos en metas concretas para este año, de manera que sienta que avanza en la dirección correcta y que cada vez está un paso más cerca de donde quiere llegar.

Establezca objetivos concretos y realistas en las cinco dimensiones (emocional, espiritual, física, intelectual y económica) que puedan lograrse durante este año. Esto le ayudará a identificar qué aspectos debe cambiar, qué acciones debe realizar y en cuáles debe enfocarse para alinear su día a día con su propósito superior.

 

5. ¿Qué hábitos me gustaría implementar en mi vida?

Tan importante como analizar sus propósitos de vida y sus objetivos anuales es revisar los hábitos y rutinas de su vida diaria. Identifique qué le ayuda a mantenerse feliz y positivo y establezca un plan para deshacerse o cambiar aquellos que no lo propician.

Identifique también qué hábitos o rutinas siente que le hacen falta. Cosas tan simples como meditar antes de acostarse, ejercitarse 10 minutos por la mañana, agradecer al final de cada día o implementar un nuevo pasatiempo podrían marcar una gran diferencia para mantener una actitud positiva durante todo el año y ayudarle a cumplir sus metas. 

Fuente: https://www.timeescool.com/post/5-reflexiones-para-empezar-el-a%C3%B1o