No son vacaciones: el aislamiento en el hogar afecta nuestra salud mental (y qué hacer al respecto)
La situación que estamos viviendo actualmente esta afectado la salud mental de cada uno de nosotros. Todos debemos dar lo mejor claro, pero es importante que reconozcamos que nos sentimos raros e incluso mal, que nuestros hijos también lo están, y que esto puede afectar incluso cómo nos comportamos y reaccionamos. Por ello, es importante que nos cuidemos de una manera diferente, siendo proactivos con respecto a nuestra salud mental.
Porque estábamos viviendo nuestras vidas como de costumbre y de repente apareció un virus que cambió la vida tal como la conocíamos. Los colegios cerraron; nuestros hijos están en casa sin ninguna estructura o actividad, excepto lo que creamos o hacemos cumplir. Ahora cada viaje fuera de casa se ha convertido en una expedición. Para aquellos que no pueden trabajar desde casa, el trabajo se volvió peligroso o desapareció, llevándose ingresos. Los suministros se volvieron precarios. Las interacciones con cualquier persona fuera de nuestra casa se volvieron casi completamente virtuales o inexistentes.
Porque estábamos viviendo nuestras vidas como de costumbre y de repente apareció un virus que cambió la vida tal como la conocíamos. Los colegios cerraron; nuestros hijos están en casa sin ninguna estructura o actividad, excepto lo que creamos o hacemos cumplir. Ahora cada viaje fuera de casa se ha convertido en una expedición. Para aquellos que no pueden trabajar desde casa, el trabajo se volvió peligroso o desapareció, llevándose ingresos. Los suministros se volvieron precarios. Las interacciones con cualquier persona fuera de nuestra casa se volvieron casi completamente virtuales o inexistentes.
- Es importante mantener un horario, pero también lo es ser realista. Tener un horario diario es importante, especialmente para los niños, debe hacer uno y seguirlo. Sin embargo, no sea demasiado ambicioso. Si tiene niños en edad escolar, asegúrese que tengan suficiente tiempo para hacer su trabajo (esto variará de un niño a otro), pero no se sienta obligado a hacerlo en las horas que coinciden con el horario escolar (si sus hijos nunca han sido madrugadores, ¿por qué forzarlo ahora?). Si su hijo no puede hacer el trabajo, libérelos un poco; la mayoría de nosotros los padres no somos maestros capacitados y descubriremos cómo solucionarlo todo cuando esto termine. Por otro lado, si sus hijos están interesados en leer, aprender un nuevo idioma o adquirir conocimientos y habilidades adicionales durante este tiempo, excelente, anímelo pero no lo fuerce, en estos tiempos, y en ocasiones es bueno mantener la la barra baja.
- Programe el autocuidado. Todos los miembros de la familia deben tener tiempo para hacer lo que los hace felices.
- Programe diversión. Hornear galletas, jugar, pintar, armar rompecabezas son actividades que las valorarán todos los miembros de la familia.
- Haga del ejercicio una prioridad. El ejercicio hace toda la diferencia para nuestra salud física y mental. Si puede salir de manera segura, hágalo; dar un paseo familiar diario, por ejemplo. Si no puede salir, organice una fiesta de baile todos los días. Practique yoga: no ocupa mucho espacio y ayuda con el estrés, y la ventaja es que ahora hay muchos videos que muestran cómo hacerlo.
- Utilice la tecnología para conectar con las personas. Asigne un tiempo todos los días para llamar a personas a través de FaceTime, WhatsApp... tal vez algunos amigos y/o familiares con los que ha perdido contacto a lo largo de los años (¡hay más personas en casa ahora!). Con ellos también podrá agendar fechas de juegos virtuales y otras actividades.
- Realice una dieta de los medios de comunicación. Sí, tenemos que estar al tanto de las noticias. Pero hacer clic obsesivamente en los enlaces solo te hará sentir más ansioso.
- Recuerde que todos deben dormir lo suficiente y trate que todos en casa mantengan en un horario de sueño regular. Apagar las pantallas por la noche, parar los video-juegos y configurar un despertador por la mañana son iniciativas que ayudarán a que tenga un sueño adecuado y que a su vez estén todos más descansados para afrontar un nuevo día.
- Estrés, bondad y ser paciente:
- Todos nos ponemos de mal humor y pesados cuando estamos ansiosos y tristes. Es probable que esta situación saque a relucir nuestros aspectos negativos. Ponga reglas sobre cómo se deben tratar entre sí. Tomar un respiro e intentar redirigirse antes de gritar son estrategias muy importantes durante el confinamiento. Si un respiro no es suficiente, tómese un momento y regresará mejor.
- Tome en cuenta que las estrategias habituales de manejo del estrés podrían no funcionar; estos son tiempos extraordinarios, por lo que las cosas que normalmente realiza para ayudarse a sí mismo o a sus hijos pueden no ser suficientes. Busque ayuda si cree que lo necesitan, esto puede ayudarle a manejar de mejor forma la situación.
Fuente: https://www.health.harvard.edu/blog/not-a-staycation-isolating-at-home-affects-our-mental-health-and-what-to-do-2020041319519