¿Cómo reducen las personas las probabilidades de contraer cáncer?

La información sobre la prevención del cáncer sigue evolucionando. Sin embargo, se acepta ampliamente que las elecciones de estilo de vida afectan las probabilidades de contraer cáncer.

Considere estos consejos de estilo de vida para ayudar a prevenir el cáncer:


1. No use tabaco  

Fumar se ha relacionado con muchos tipos de cáncer, incluidos los de pulmón, boca, garganta, laringe, páncreas, vejiga, cuello uterino y riñón. Incluso estar cerca del humo de segunda mano podría aumentar el riesgo de cáncer de pulmón.

Pero no solo fumar es dañino. Masticar tabaco se ha vinculado con el cáncer de boca, garganta y páncreas.

Alejarse del tabaco, o decidir dejar de usarlo, es una manera importante de ayudar a prevenir el cáncer. Para obtener ayuda para dejar el tabaco, consulte a un proveedor de atención médica sobre los productos para dejar de fumar y otras formas de abandonar el hábito.


2. Coma una dieta saludable  

Aunque consumir alimentos saludables no garantiza la prevención del cáncer, podría reducir el riesgo. Considere lo siguiente:

  • Coma muchas frutas y verduras. Base su dieta en frutas, verduras y otros alimentos de origen vegetal, como cereales integrales y legumbres. Coma más ligero y más magro eligiendo menos alimentos ricos en calorías. Limite los azúcares refinados y las grasas de origen animal.
  • Beba alcohol solo con moderación, si es que lo consume. El alcohol aumenta el riesgo de varios tipos de cáncer, incluidos los de mama, colon, pulmón, riñón e hígado. Cuanto más beba, mayor es el riesgo.
  • Limite el consumo de carnes procesadas. Comer carne procesada con frecuencia puede aumentar ligeramente el riesgo de ciertos tipos de cáncer. Esta noticia proviene de un informe de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, el organismo especializado en cáncer de la Organización Mundial de la Salud.
  • Las personas que siguen una dieta mediterránea que incluye aceite de oliva virgen extra y frutos secos variados podrían tener un riesgo reducido de cáncer de mama. La dieta mediterránea se centra principalmente en alimentos de origen vegetal, como frutas y verduras, cereales integrales, legumbres y frutos secos. Quienes siguen esta dieta eligen grasas saludables, como el aceite de oliva, en lugar de mantequilla. Comen pescado en lugar de carne roja.


3. Mantenga un peso saludable y sea físicamente activo

Tener un peso saludable podría reducir el riesgo de algunos tipos de cáncer, incluidos los de mama, próstata, pulmón, colon y riñón.

La actividad física también cuenta. Además de ayudar a controlar el peso, la actividad física por sí sola podría reducir el riesgo de cáncer de mama y colon.

Cualquier cantidad de actividad física beneficia la salud. Pero para obtener el mayor beneficio, procure al menos 150 minutos a la semana de actividad aeróbica moderada o 75 minutos a la semana de actividad aeróbica intensa.

Puede combinar actividad moderada e intensa. Como objetivo general, incluya al menos 30 minutos de actividad física en su rutina diaria. Más es mejor.


4. Protéjase del sol  

El cáncer de piel es uno de los tipos más comunes de cáncer y uno de los más prevenibles. Pruebe estos consejos:

  • Evite el sol del mediodía. Manténgase alejado del sol entre las 10 a.m. y las 4 p.m., cuando los rayos del sol son más fuertes.
  • Permanezca a la sombra. Cuando esté al aire libre, manténgase en la sombra tanto como sea posible. Las gafas de sol y un sombrero de ala ancha también ayudan.
  • Cubra su piel. Use ropa que cubra la mayor cantidad posible de piel. Use un sombrero y gafas de sol. Use colores brillantes o oscuros. Reflejan más los rayos dañinos del sol que los colores pastel o el algodón blanqueado.
  • No escatime en protector solar. Use un protector solar de amplio espectro con un SPF de al menos 30, incluso en días nublados. Aplique una cantidad generosa de protector solar. Vuelva a aplicarlo cada dos horas, o con más frecuencia después de nadar o sudar.
  • No use camas de bronceado ni lámparas solares. Pueden causar tanto daño como la luz solar.


5. Vacúnese

Protegerse contra ciertas infecciones virales puede ayudar a protegerse contra el cáncer. Hable con un proveedor de atención médica sobre la posibilidad de vacunarse contra:

  • Hepatitis B. La hepatitis B puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de hígado. Los adultos con alto riesgo de contraer hepatitis B son aquellos que tienen relaciones sexuales con más de una pareja, las personas con una pareja sexual que tiene relaciones con otros, y las personas con infecciones de transmisión sexual.
  • Otros en riesgo son las personas que se inyectan drogas ilegales, los hombres que tienen sexo con hombres y los trabajadores de la salud o la seguridad pública que pueden tener contacto con sangre o fluidos corporales infectados.
  • Virus del papiloma humano (VPH). El VPH es un virus de transmisión sexual que puede causar cáncer de cuello uterino y otros tipos de cáncer genital, así como cánceres de células escamosas en la cabeza y el cuello. La vacuna contra el VPH se recomienda para niñas y niños de 11 y 12 años. La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. aprobó recientemente el uso de la vacuna Gardasil 9 para hombres y mujeres de entre 9 y 45 años.


6. Evite comportamientos de riesgo

Otra táctica eficaz para la prevención del cáncer es evitar comportamientos de riesgo que puedan conducir a infecciones que, a su vez, podrían aumentar el riesgo de cáncer. Por ejemplo:

  • Practique sexo seguro. Limite el número de parejas sexuales y use condón. Cuanto mayor sea el número de parejas sexuales a lo largo de la vida, mayores serán las probabilidades de contraer una infección de transmisión sexual, como el VIH o el VPH.
  • Las personas con VIH o SIDA tienen un mayor riesgo de cáncer de ano, hígado y pulmón. El VPH se asocia con mayor frecuencia con el cáncer de cuello uterino, pero también podría aumentar el riesgo de cáncer de ano, pene, garganta, vulva y vagina.
  • No comparta agujas. Inyectarse drogas con agujas compartidas puede llevar al VIH, así como a la hepatitis B y C, que pueden aumentar el riesgo de cáncer de hígado. Si le preocupa el abuso de drogas o la adicción, busque ayuda profesional.

7. Reciba atención médica regular

Realizar autoexámenes regulares y someterse a pruebas de detección de cáncer, como los de piel, colon, cuello uterino y mama, puede aumentar las probabilidades de detectar el cáncer a tiempo. Ese es el momento en que el tratamiento es más probable que tenga éxito. Pregunte a un proveedor de atención médica sobre el mejor programa de detección de cáncer para usted.


Fuente: https://www.mayoclinic.org/healthy-lifestyle/adult-health/in-depth/cancer-prevention/art-20044816

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